De acuerdo al informe realizado por el Ministerio de Salud con datos del INDEC, este año el índice de precios de los medicamentos e insumos en salud estuvo por debajo del Índice de Precios al Consumidor, en 9 de los 10 meses que informadas por el instituto hasta hoy. La variación en los precios de los medicamentos fue un 25% menor en comparación con el resto de los precios.
En el marco del último encuentro del Consejo Federal de Salud (COFESA), que tuvo entre sus temas centrales la evolución de los precios de los medicamentos en Argentina, se presentó el Informe de precios de medicamentos en Argentina, basado en indicadores clave que analizan la evolución de los precios durante 2024 y su tendencia desde 2023.
El informe arrojó que, este año, el índice de precios de los medicamentos e insumos en salud estuvo por debajo del Índice de Precios al Consumidor (IPC) en 9 de los 10 meses que hasta hoy informó el INDEC. La variación en los precios de los medicamentos registró un 25% menos de aumento comparado con el resto de los precios.
Mientras que el IPC de productos medicinales, artefactos y equipos para la salud en 2023 estuvo por encima del índice de salarios en un 80,5%, durante 2024 se observa que el coeficiente de variación salarial aumentó un 47.1% más que el correspondiente al IPC de productos medicinales, artefactos y equipos para la salud.
En contraste con el 2023, donde los medicamentos de alto precio aumentaron un 55,4% más que el IPC General (+211,4%), el 2024 refleja un notable cambio en la dinámica de precios, estando por debajo de la inflación general y manteniendo una tendencia a la baja.
Priorización de indicadores y análisis del informe
En la priorización de indicadores, se eligieron el IPC Nivel General, el IPC Salud, el IPC Salud (productos medicinales, artefactos y equipos para la salud) y una canasta total de medicamentos que incluye todos los productos farmacéuticos disponibles en el mercado.
Los tres primeros indicadores fueron seleccionados por su amplia cobertura territorial y regularidad en la publicación. Esto garantiza una visión representativa y confiable de las dinámicas económicas. Además, se tomó la decisión de utilizar el año calendario, que permitió analizar tendencias completas y evaluar impactos de manera consistente.